El colchón que elijas para tu cama te acompañará todas las noches durante muchos años, por lo que su elección debe ser cuidadosa para no elegir equivocadamente. La mala elección de un colchón puede ocasionarte problemas de espalda irreversibles.
A continuación, una serie de factores que hay que seguir para acertar y elegir el colchón correcto.

 Elegí tu nivel de comodidad
Primero, tené en cuenta que el largo del colchón debe ser, al menos, 10 centímetros más largo que la altura que mide la persona que dormirá sobre él. De este modo, tendrá más espacio para extenderse. Del mismo modo, si es una cama para una sola persona, lo ideal es optar por una plaza y media. Si es una cama matrimonial, es aconsejable que el colchón sea de dos plazas y media.

Segundo, verificá que el colchón ofrezca un buen soporte para tu espalda, y asegurate de que te sea cómodo, que te brinde una sensación agradable en la superficie.

Recordá que el colchón será el soporte de tu espalda, por lo que debe ser de buena calidad. Al igual que la almohada, lo ideal es que el colchón mantenga la curva natural de tu cuerpo, para no sufrir de dolores de cuello y espalda al levantarte.

Un colchón alto es sinónimo de alta calidad. Garantizan mucha más comodidad que los colchones que se fabricaban hace 15 años.

Finalmente, asegurate de lo que querés, para que el colchón que elijas se ajuste a esos parámetros y descripción.


¿Sufrís de dolores de espalda? Apostá por la buena calidad

La principal recomendación es que no escatimes en precios en lo que a un colchon se refiere. Recordá que estarás invirtiendo en tu salud.
Si habitualmente sufrís dolores de espalda, hablá con tu médico de cabecera para que te recomiende algunos parámetros para el colchón adecuado. De este modo, ahorrarás en tratamientos médicos posteriores.

Un buen colchón debe ser duradero. Tené en cuenta que te tiene que durar 10 años, tiempo ideal para cambiarlo antes de que se haya desgastado mucho.